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La pandemia de COVID-19 convirtió los hogares guatemaltecos en aulas después de que se suspendieran las clases “normales” en marzo de 2020. En 2021, las escuelas y los niños se adaptaron a un modelo híbrido de educación, ya que los estudiantes visitaron su escuela cada semana o dos para entregar tareas y recibir guías de aprendizaje para llevar a casa durante las siguientes semanas.
Desafortunadamente, las familias de escasos recursos no pudieron cubrir los gastos de artículos básicos de limpieza para garantizar la seguridad de sus hijos durante las visitas escolares, ya que las propias escuelas informaron continuamente de una escasez de estos suministros de higiene.
Para garantizar una visita segura a la escuela y promover los hábitos de higiene, el proyecto Comunidades Liderando su Desarrollo (CLD) de USAID y CRS brindó a 10,320 niños en 69 escuelas de los departamentos de Quiché, Huehuetenango y Quetzaltenango un kit de prevención de COVID-19 con productos de higiene personal, limpiadores de superficies, máscaras faciales y capacitación relacionada para ayudar a prevenir la propagación de COVID-19.
“Reforzar los hábitos adecuados de higiene era importante para padres e hijos, ahora todos los niños vienen con una mascarilla y con las manos lavadas, creo que tenemos un ambiente más seguro y limpio”. – Magdalena Brito, docente en el comunidad de La Pista Xejalvinte, Nebaj, Quiché.
“Mi esposo es jornalero, gana Q60 quetzales al día, eso no es suficiente para nosotros y nuestros tres hijos. No podemos comprar estos artículos de limpieza nosotros mismos, por eso es importante, de lo contrario mis hijos solo se lavarían las manos con agua”. – Margarita Chuchil, beneficiaria en comunidad de La Pista Xejalvinte, Nebaj, Quiché.
El reto para las instituciones, los maestros, los niños y los padres de familia, es poder mantener una buena salud y garantizar la continuidad de su educación.
CLD está ayudando a los niños a continuar su educación a pesar de la pandemia; a medida que la educación normal en Guatemala está en evaluación, los estudiantes y maestros están capacitados y mejor equipados para un segundo año académico híbrido.
“Recibimos capacitación sobre el uso adecuado de los insumos de limpieza e higiene; también lo hicieron padres e hijos. Es esencial inculcar hábitos de higiene y prevención de COVID-19, como buenas prácticas de higiene, combinadas con el distanciamiento social y el uso de una máscara. Esta comunidad es grande, y es una de las más pobres de este municipio, la gente vive día a día y con lo que gana no puede comprar cosas como jabón o una mascarilla”. – Omar Castillo, director de escuela en comunidad de La Montaña, La Libertad, Huehuetenango.
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